Obras Maestras - "Shout At The Devil"

Este disco marcó muchisimo en la escena de hard-rock de los ochenta y para el Concilio también es considerado un álbum que merece ser recordado. Esta es una reseña del Padrino sobre este "masterpiece".



El segundo álbum lanzado por Mötley Crüe se llamó “Shout At The
Devil” y te digo que sinceramente es de lo mejor de los Crüe. Vas a escuchar cosas como “pero Dr. Feelgood vendió muchas más copias" y no hay nada que decir al respecto, pero los fanas a muerte de la banda sabemos que lo mejor que hicieron fue este disco, precisamente por haber marcado a fuego los 80.

El precedente a “Shout at the devil” fue “Too Fast for Love” que sin ser un mal disco, y pese a presentar la mas pura esencia de la banda, carecía de cierta madurez, sobre todo en lo que se refiere a la voz de Vince Neil.

“Shout at the devil” compensó cualquier error hecho en el primer disco. La imagen de la banda comenzaba a definirse, una especie de chicos malos recién salidos de alguna película tipo Mad Max, y así mismo su música hacía lo propio.

Shout At The Devil fue lanzado en 1983, un año después del debut mencionado precedentemente por el sello Electra y musicalmente y la banda paso de ese estilo “sleazy punk rock” hacia “sleazy metal”.

Aunque las canciones de mantuvieron simples los riffs se hicieron algo más complejos y potentes. No se que opinión tenés pero Mick Mars es un violero muy desvalorado y realmente brilla en este disco. Nikki Sixx definitivamente no es uno de esos bajistas que quedarán en la historia por su ejecución pero es muy valioso su trabajo en el álbum el cual le da un toque distinto a los temas y sale del “bajista estándar”, el prácticamente escribió la mayor parte del material de los primeros dos álbumes y es el corazón y alma de los Crüe.

Temas:

In The Beginning: Esta es una infame introducción, que tienen un sonido bien oscuro y siniestro y presenta a la canción que sigue con las palabras “so come now children of the beast, be strong, and SHOUT AT THE DEVIL!!!" (así que vengan ahora niños de la bestia, sean fuertes, y GRITENLE AL DIABLO!!!)

Shout At The Devil: Esta canción es de culto y es raro que asistas a un show de la banda y no toquen este tema. Tiene un sonido muy heavy y rompe con los gritos de Shout, Shout, Shout, SHOUT AT THE DEVIL. Los versos iniciales son cantados a pleno por Vince Neil quien realmente brilla aquí.

Looks That Kill: Esta canción tiene en mi opinión uno de los mejores riffs del hard rock, difícil de que te lo saques de la cabeza. Muchos la consideran como la mejor canción de la banda.

Bastard: Esta canción fue escrita por el ex manager de la banda. Definitivamente no es le tema que le tocarías a tu hija de dos años. Tiene un gran solo y una letra muy buena.

God Bless The Children of The Beast: Este es un instrumental compuesto por Mick Mars. Es terrible, sobre todo después de escuchar Bastard. Acá brilla el talento de Mick en las seis cuerdas.

Helter Skelter: Esta canción se hizo rápidamente popular entre los fans. Como sabrás, la canción fue compuesta originalmente por The Beatles, no hay mucho para decir, es un buen cover.

Red Hot: Muy subvalorada, me parece que es el tema que más te patea en el disco con su corito ganchero "Red Hot, Red Hot, To the top, We are Red Hot!". Terrible la batería acá y el riff de Mick ni hablar, desafortunadamente la letra no es tan provocadora pero termina siendo un tema glorioso.

Too Young To Fall In Love: No te engañes, no es una canción de amor, es básicamente sobre una mala relación, tiene un “tempo” lento pero tiene un gran gancho lo cual lo hace un gran tema.

Knock Em Dead, Kid: Esta es pegadiza. Nikki Sixx la escribió relatando una golpiza que recibiera y nos recuerda al primitivo Crüe. Quizás una de las canciones más pesadas de la banda.

Ten Seconds To Love: Esta parece reflejar el estilo de vida que la banda llevaba por aquellos momentos. Quizás una de las más glam del álbum “Oh., aquí voy, mi mente está a punto, lista para amar, eres mi segunda mascota”, ¿se entiende?. Y es ganchera también.

Danger: una “power ballad” y también pasada al olvido sin contemplación. Es una excelente forma de cerrar el álbum y tiene un trabajo compositivo excelente, hablá acerca de los “peligros” de Hollywood y realmente te deja satisfecho.



“Shout at the devil” marcó el inicio de una época en la música rock, y fue el detonante definitivo de la escena hard-rockera americana de mediados de los 80. Todos y cada uno de sus temas son imprescindibles, y en ningún momento encontrarás ni un solo, ni un toque de batería, ni una línea vocal que sea de relleno.

Padrino