EDGUY – El Teatro 20-02-2009

Un gran comienzo del año, a todo motor en el Teatro, que últimamente se viste de acero para recibir a diferentes bandas del metal y como no podía ser de otra manera, también albergó a Edguy. La banda del talentoso Tobías Sammet llegaba con la edición bastante reciente de Tinnitus Sanctus, un cd bastante variado y bastante fuera de lo que Edguy nos ofrecía por lo que tenía dudas de la concurrencia, febrero, vacaciones, calor, Deep Purple en la misma fecha y si a esto le sumamos que en la vez anterior el Teatro no se había llenado, no había una buena predisposición a lo que a concurrencia se refiere. Debido a problemas con el tránsito, mi llegada al recinto se retrasó en más de una hora, por lo que no pude apreciar a la gente amiga de Nelwing, que vinieron de la lejana Tucumán para soportar a los alemanes, por lo que pido la debidas disculpas del caso. Habia comenzado el set una banda algo metálica con toques de Gothic y Sinfónico (bastantes leves por cierto) llamada Dark Light, que me sorprendió por lo bien que sonaban y por su buen cantante sobre todo, que en alguna medida me hacia acordar a Lizzy Borden en la voz, solo que sin la variedad de éste, ahí recaía su punto flojo, ya que estar tan algo todo el tiempo satura en parte, pero por lo demás, la banda suena, y logra su cometido, gustar a la audiencia.

Terminado el acertado set de Dark Light, hizo su presencia Renacer la banda de Chrisian Bertoncelli, y que quieren que les diga, me parece mucho más interesante su trabajo en Imperio. En Renacer solo canta bien arriba, haciendo insoportable su propuesta a partir del tercer tema, por otro lado alguien que está al frente de una banda debe de salirse del libreto de la guitarra invisible...en fin, temas monótonos matizados por los gritos histéricos de su cantante. NEXT...

Siendo las 21:30 Edguy tomó por asalto el escenario, con todo su potencial, Tobias contrariamente a la amarga firma de autógrafos que protagonizó, se mostró suelto, con buen semblante, haciendo que la noche sea magnífica. Haciendo hincapié en su reciente Tinnictus Sanctus, los teutones desarrollaron un show magnífico, potente, con entrega. El punto sería que hasta el 5º tema, todo sonó bastante bola, muy ruidoso, que llevó a Tobias a protestar por el sonido, diciendo que estaba sufriendo un complot, preguntando repetidas veces si lo escuchábamos. Recién en Babylon sonó como tenía que ser, y desde ese momento, la banda se escuchó clara y precisa, con potencia y gran sonido. Abrieron con Dead or Rock, lo que a las claras confirma la tendencia de Edguy al hard rock antes que el power melódico que cultivó hasta Mandrake. Tobias estuvo en muy buena forma, cantó excelentemente, con la mancha del mencionado retorno ya mencionado. La banda cumplió su rol casi en forma perfecta, Felix fue un motor, bien acompañado por el otro Tobias (Exxel), la dupla de violas sonó bien a excepción de Jens que tuvo la guitarra desafinada durante dos o tres canciones hasta que se dio cuenta, quizás producto del sonido aturdidor del momento. El público vibró, saltó cada una de las intervenciones de la banda, hicieron sus temas más recordados, “ Vain Glory Opera”, “Tears of Mandrake”, “Babylon”, “Superhéroes”. No faltó entrega de la banda y una gran actitud con comentarios como “que chica quiere coger conmigo esta noche?” que si bien puede quedar fuera de lugar, a varias les encantó, sirvió para dar entrada a esa tremenda balada que es “Save Me”. Cerrando con el tremendo hit en potencia que es Superhéroes.
No faltaron los bises... Lavatory Love Machine y la tremenda King of Fools, dejándonos con un buen sabor de boca. Realmente una pequeña gran máquina de rock estos muchachos, que seguramente lo tendremos otra vez por aquí.


Intro
Dead Or Rock
Speedhoven
Tears Of A Mandrake
Vain Glory Opera
The Pharaoh
Ministry Of Saints
Drum Solo
Pride Of Creation
The Headless Game
Save Me
Superheroes

Lavatory Love Machine
King Of Fools


Marcelo Díaz